La capacidad volumétrica máxima para cocción es de 3/4 de la capacidad total de la pieza.
Pon los mangos de los utensilios hacia el centro de la cocina. En cocinas con rejilla, centraliza la pieza y alinea el mango a la rejilla.
Cuando se use en cocinas con base lisa, levanta la pieza para movilizarla, evitando arañar tu cocina. Utensilios calientes se deben dejar fuera del alcance de los niños.
Este producto no puede sufrir modificaciones.
Antes del primer uso, lávalo manualmente con esponja blanda, jabón o detergente neutro. Sécalo con un paño blando.
Después de secarla, unta el área interna con aceite o grasa y llévala al fuego durante uno o dos minutos.
Déjala enfriar y lávala nuevamente.
Tu utensilio está listo para el uso con o sin grasa, siempre a fuego bajo o mediano (nunca superior a 260 ºC).
Seca totalmente las piezas con un paño blando y guárdalas siempre en lugares secos y ventilados, lejos de vapores o cualquier tipo de humedad.
Para revolver los alimentos, usa solamente utensilios de silicona, nylon o madera.
El hierro esmaltado es extremadamente resistente, pero puede dañarse si se cae o se golpea contra una superficie dura; por lo tanto, evita caídas e impactos que puedan provocar el desprendimiento del esmalte.
Si eso ocurre, puede formarse herrumbre en el área afectada, sin alterar el desempeño del utensilio.
Para proteger el área dañada, úntala con aceite alimenticio embebido en papel toalla.
Limpieza: Evita el choque térmico, no sumerjas el utensilio caliente en agua fría.
Nunca uses productos abrasivos en el lavado.
Si dejas quemar alimentos, humedece el área con agua y límpiala con esponja y jabón neutro.
Después de la limpieza, aplica una capa fina de aceite alimenticio en el borde de la pieza (cuerpo y tapa).
Para desechar productos y envases sigue las orientaciones de reciclado vigentes.

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Cacerola en Hierro Esmaltado de 24 cm 4 L Tramontina Trento